Charla sobre un futuro tratado que es el gran desconocido

Alfredo Mazariegos alertó sobre las drásticas consecuencias que tendrá el TTIP en los derechos laborales, económicos y políticos

Alfredo Mazariegos y David Armendariz durante la charla (Foto:Plazaberri)

Organizada por la Asamblea Anticrisis y la Plataforma Social de Barañain se celebró el jueves pasado, 27 de noviembre, una charla con el historiador Alfredo Mazariegos para explicar qué es el TTIP y cómo afectará a la población. El ponente advirtió sobre los recortes en derechos laborables, económicos y políticos que supondrá el Tratado Transatlántico para el Comercio y la Inversión que ultiman EEUU y la Unión Europea y alertó del secretismo con el que se está negociando este tratado.

La charla comenzó explicando los diferentes acuerdos para el comercio que han ido surgiendo a lo largo de los 25 últimos años, desde la caída del bloque soviético y con él, «el fin de las revoluciones contra el poder del capital», en palabras de Mazariegos. Tras está caída surge el Consenso de Washington, «impulsado por EEUU para establecer nuevas reglas dentro del capitalismo mundial».

En aquel acuerdo en el que participaron todos los países de la esfera estadounidense y europeos, se habló de reformas y liberalizaciones de los mercados y comenzó a aplicarse en el continente americano. En Europa se firma en 1992 el Tratado de Maastricht donde se introducen elementos del Consenso de Washington y en 1994 entra en vigor el Tratado de Libre Comercio (NAFTA) firmado en 1992 por Canadá, EEUU y México, en cuya respuesta surge también el movimiento zapatista. En Europa se siguió profundizando en los elementos del consenso mediante el tratado de la UE y el euro, pero también con las luchas dentro de las potencias económicas por una hegemonía de los recursos.

Rapidez con las negociaciones

«¿Cómo se hace público el TTIP? Aunque parezca mentira no es hasta febrero de 2013 cuando Obama interviene en su discurso en el Estado de la Unión y habla del inicio de conversaciones», explica Mazariegos. «Quieren ir a toda velocidad para que no haya reacción como la que hubo con el NAFTA y quieren que sean secretas porque es una amenaza al conjunto de la población», argumenta el historiador.

«La amenaza no es la eliminación de los aranceles, que son muy bajos ya; lo que está en el meollo es la eliminación de las barreras reguladoras que limitan los beneficios de las transnacionales. ¿Qué barreras son? Todos los derechos laborales, los servicios públicos, los derechos relacionados con la seguridad alimentaria, la legislación medioambiental, en acceso a la información… y las pocas regulaciones a la banca que hay», señala.

Mazariegos alerta que «quieren colocar a las multinacionales en un estatus igual o superior a los estados» y explica que las empresas podrán dictar las legislaciones de los países. «Podrán demandar y pedir que se modifique una legislación que ponga trabas a su actividad y pedir también compensaciones económicas si fuera necesario», añade y detalla que el tratado no afectará sólo a legislaciones nacionales, sino también a la actividad municipal y regional. «Tendrían potestad de marcar la línea político-económica de municipios y regiones», señala.

Secretismo

Como muestra del secretismo con el que se están llevando a cabo las negociaciones entre la Comisión Europea (CE) y el gobierno de EEUU, el jefe del equipo regulador dijo que los documentos de la negociación serían secretos durante 30 años y los protocolos de la CE indican que se negará el acceso a los documentos incluso a funcionarios europeos.

Lo que sí se sabe, según el historiador, es que «según un mandato de la CE a sus negociadores, que es confidencial, se considera la eliminación de obstáculos regulatorios como una prioridad del TTIP» y añade que «funcionarios de Gran Bretaña han reconocido que una de las prioridades del TTIP es abrir el sector de servicios públicos a la contratación de empresas de otros estados miembros». Según Mazariegos, «la Comisión Europea reconoce que las políticas soberanas de los estados se verán afectadas y que afectará a la legislación básica de la UE».

Capacidad de veto

Según indica Mazariegos, se dará a las empresas la opción de eliminar normativa y una vez aprobada una ley, de no plegarse a ella. Además las empresas también tendrán capacidad de ser notificadas de todas las normativas en proceso de elaboración antes de su aprobación por los estados.

«Para justificarse dicen que crearán beneficios económicos, pero según un estudio de impacto encargado por la CE al Centro de Investigación Política Económica, las hipótesis más optimistas hablan de una mejora económica del 0,5% en el 2027 con este acuerdo y alertan de perjuicios elevados a los trabajadores de la UE, con una pérdida de empleos que podría alcanzar los dos millones en EEUU y en Europa. De hecho, para asistir al número elevado de desempleo que se prevé, la CE está preparando fondos e indica que se acuda al Fondo Social Europeo y a otros fondos».

Asimismo, Mazariegos señala que EEUU quiere meter en el tratado su regulación laboral y recuerda que este país no tiene ratificados los convenios fundamentales de la Organización Internacional del Trabajo que protegen la libertad sindical o la negociación colectiva, por ejemplo.

Se pretende asimismo recortar los salarios y los pagos de las empresas al fondo de pensiones. «Cualquier demanda para mejorar las condiciones de empleo podrá ser recurrida por las empresas», alerta.

Seguridad alimentaria

En lo que respecta a la regulación en materia de salud, seguridad alimentaria y legislación medioambiental «EEUU quiere que se restrinjan y eliminen, ya que van en detrimento de la introducción de productos de su país, con una legislación más laxa». Asimismo alertó de que el tratado permitirá la entrada masiva de alimentos transgénicos.

Según el historiador, «en la UE existe el principio de cautela y según este debe ser el productor el que tiene que demostrar que su producto no es nocivo y si existe cualquier tipo de riesgo, incluso de sospecha, se retira aunque no haya pruebas concluyentes. Ese principio no se aplica en EEUU y lo quieren eliminar». Según Mazariegos, la UE estuvo conforme en revisar su legislación de seguridad alimentaria y puso como ejemplo de su voluntad, que la UE haya levantado la prohibición que existía con la importación de carne de cerdo de EEUU.

En lo que respecta a la normativa sobre el uso de sustancias químicas existe también incompatibilidad entre las regulaciones de EEUU y la UE, «pero la UE admite que siguen buscando una posible convergencia».

Servicios públicos

En opinión de Mazariegos otra de las cosas a eliminar serán los servicios públicos. Según explicó, «la UE quiere que se puedan privatizar los servicios públicos dejando al margen solo la seguridad, el control de fronteras y de tráfico y el sistema judicial. Todo lo demás se podrá privatizar y luego será imposible recuperar esos servicios».

En lo que respecta a los derechos de acceso a la información, «se habla de los derechos de propiedad intelectual para fortalecer el poder de las transnacionales en el conocimiento de la población» y se valora quitar las exenciones de los derechos de propiedad intelectual para bibliotecas o centros educativos.

Ratificaciones

Mazariegos explicó cuáles son los pasos que seguirá este tratado para ser ratificado. Indica que debe ser aprobado en todos los países de la UE y que si uno de ellos no está de acuerdo no se podría aprobar, aunque mostró sus reservas a que la decisión de un estado fuera finalmente decisiva. Indicó que en Alemania están llevando a cabo una consulta a sus tribunales para valorar como afecta a la constitución alemana y que en Grecia, su gobierno ya se ha mostrado contrario al TTIP.

En el Estado español, PP, PSOE, UPyD, PNV y CiU rechazaron en mayo de este año someter a referéndum el tratado. El 25 de noviembre el PP y CiU aprobaron una proposición no de ley pidiendo a la UE que acelere la aprobación del tratado.

Mazariegos finalizó apelando a la movilización ciudadana, «si hay respuesta en la calle y algún parlamento no lo aprueba se podría parar».

Itzulpena > Traducción

TTIPren eraginak ezagutzeko hitzaldia

Iragan ostegunean, azaroaren 27an Barañaingo Antikrisi Batzarrak eta Plataforma Sozialak antolatua TTIP ituna zer den azaldu eta eraginak aztertzeko hitzaldia egin zen Kultur Etxean, Alfredo Mazariegos historiadorearen eskutik. Merkataritza eta Inbertsio Itun Trasatlantikoak, TTIP bere ingelesezko sigletan, Amerikako Estatu Batuak eta Europako Batasunak negoziatzen ari duten ituna da, europako hainbat lege aldaraziko dituena eta sekretupean negoziatzen ari dena, ohartarazi zuen Mazariegosek.

Bere iritziz, itunak ahalbideratuko du enpresek legeak aldaraztea edo horiei kasurik ez egitea, legeen aurrean demandak jarri ahal izanen dituztelako enpresek. Era berean, lan eskubideak murriztuko direla gaineratu zuen: soldatak jeitsiko dira, enpresek pentsioen kutxara egiten dituzten ekarpenak gutxituko dira eta langileen eskubideak murriztuko dira. Baita ere, datozen urteetan Europan eta Estatu Batuetan 2 miloi lanpostu galdu ahal izanen direla aitortu zen Europako Komisioak enkargatutako eragin txosten batean.

Herrialdetako legedian eragiteko ahalmenaz gainera (ez bakarrik nazio mailako legedian, baita herrialde eta herri mailakoan) zerbitzu publikoen pribatizazioa sustatuko dela uste du Mazariegoesek, gobernuaren esku bakarrik geldituko direlarik segurtasuna, mugen eta trafikoen kontrola eta sistema judiziala.

Elikagaien segurtasuna eta osasuna eta ingurumenarekin lotutako legediak ere aldaratzea ekarriko du TTIP akordioak: elikagai transgenikoei eta kimikoei Europan ezarritako mugak leunduko direla uste da, AEBko eta Europar Batasuneko legeen artean diren inkonpatibilitateak gainditzen saiatzen ari baitira.

TTIP akordioa Europar Batasuneko nazio guztiek onartu behar dutelakoan, aurkako erabakirik gabe, gizartearen aurkako presioa egitea erabakigarria izan daiteela uste du historiadoreak. «Kalean erantzunarik badago eta nazio mailako legebiltzarren batek aurka egiten badu, ituna oztopatu daiteke», esan zuen. Momentuz, Espainiako Kongresuan herritarrei erreferendumean TTIPri buruz galdetzea atzera bota zuten PP, PSOE, UPyD, EAJ eta CiUk. Iragan astean, aldiz, PPk eta CiUk Europar Batasunari eskatu zioten negoziazioak bizkortzeko.

Diseño y desarrollo Tantatic